Encefalitis Autoinmune

Dra Victoria Martínez Ángeles Neuropsiquiatra adscrita a la Subdirección de Psiquiatría del INNN MVS Miembro de la SMNyP

La encefalitis autoinmune abarca un conjunto de enfermedades neurológicas incapacitantes que comúnmente se presentan como una encefalopatía de rápida progresión, acompañada de una amplia variedad de síntomas neurológicos y psiquiátricos. Esta condición afecta a individuos de todas las edades y conlleva una carga significativa para los pacientes, sus familias y la sociedad en general.

La superposición de síntomas entre estas enfermedades y los trastornos psiquiátricos primarios puede resultar en errores diagnósticos y retrasos en el tratamiento adecuado, lo que repercute negativamente en el pronóstico de los pacientes. Por tanto, es esencial que tanto especialistas en neurología como en psiquiatría estén familiarizados con estas condiciones para ofrecer una atención y tratamiento oportunos.

Actualmente, la encefalitis autoinmune más común es la encefalitis por anticuerpos contra el receptor anti-N-metil-D-aspartato (NMDA). Descripta por primera vez en 2005 por Vitaliani y colaboradores, este trastorno se caracteriza por síntomas psiquiátricos agudos, crisis epilépticas, déficits de memoria, disminución del nivel de conciencia e hipoventilación central, entre otros. La identificación de anticuerpos específicos en el sistema nervioso central proporciona evidencia clara de la participación del sistema inmunológico en los síntomas observados. Los criterios diagnósticos establecidos por Graus y colaboradores en 2016 han mejorado significativamente la detección y diagnóstico preciso de esta enfermedad.

El tratamiento de estas condiciones requiere un enfoque multidisciplinario que aborde diferentes aspectos, incluida la elección de estrategias inmunomoduladoras, como bolos de esteroides, inmunoglobulina y/o plasmaféresis, además del tratamiento de los diversos síntomas asociados, como psicosis, catatonia, alteraciones cognitivas y conductuales, crisis epilépticas, movimientos anormales y disautonomías, para mejorar la calidad de vida de los pacientes afectados.

En conclusión, la encefalitis autoinmune representa un desafío clínico complejo que afecta a pacientes de todas las edades y conlleva una carga significativa. La necesidad de un abordaje multidisciplinario y la implementación de criterios diagnósticos precisos son fundamentales para garantizar un manejo adecuado y mejorar el pronóstico de los pacientes afectados. La continua investigación y colaboración entre especialistas en neurología, psiquiatría e inmunología son esenciales para avanzar en la comprensión y el tratamiento de esta condición debilitante.