El bullying desde una perspectiva psicoanalítica
Sorepaye Reznik Klein
El acoso o bullying es un acoso físico, psicológico, o verbal al que se somete a una persona en un determinado grupo, en diferentes lugares bien puede ser en una escuela, trabajo, o familia
Hay una intencionalidad agresiva, en la que la pulsión sádica se manifiesta dejando efectos perdurables en la vida del que la padece, la víctima al estar inhibida ante semejante acción no emite respuesta.
El acoso es un proceso disfuncional en el cual el victimario y la víctima son síntomas y no la causa de esta agresión. Algún tiempo se consideró que este conflicto era una díada como agresor – víctima, estudios han mostrado que no se trata sólo de una díada, sino que en realidad intervienen más de dos, son cuatro la víctima, el acosador, los testigos, y el Otro que no está presente pero que la escena está dirigida a él, este Otro puede ser el padre, la madre, el maestro, director, jefe.
La escena del acoso da acceso a un goce del cuerpo y es por eso que la víctima sea golpeado, dejado de lado, burlado, para los testigos lo más importante es no quedar del lado de la víctima pues se exponen a ser ellos los próximos, y es por eso que no muestran empatía a lo que le pasa al agredido, por sentirse en riesgo y quedar en manos del acosador que es cruel.
Para la víctima vivir día a día esta situación resulta intolerable, el niño, adolescente, o el hijo empiezan a manifestar síntomas tales como mutismo, no quieren hablar, se sienten desprotegidos sin nadie que los pueda ayudar, se dan cuenta que el acosador actúa cuando no se encuentran figuras de autoridad, para poder atacar a la víctima, pero que sí tiene un número de espectadores para presenciar la escena, quienes obtienen una satisfacción sádica de la acción y sufrimiento de la persona lastimada.
Es a través de la vergüenza que estos tipos de acoso logran su cometido de silenciar a la víctima. El rol del observador que es llamado bully bystander es un participante activo y voyerista involucrado en la violencia de la escuela y no un testigo pasivo, es por eso que tiene un papel importantísimo en esta dinámica .
Kerzner (2013)menciona que el bully-bystander tiene un papel fundamental para detener el acoso o agravarlo, los Otros( autoridades) son los que pueden transformar al grupo a través del reconocimiento de esta actividad negativa, la ayuda terapéutica tanto al acosador como a la víctima, importante pero que no serán suficientes, aquí el rol del bystander o testigo da un margen al trabajo, ya que, cambiando el rol de testigo negativo a positivo, capaz de empatizar con la víctima, esto hará que el grupo cambie también, el trabajo de simbolización de los sentimientos es de suma importancia, ya que también será importante para la víctima identificar el por qué se pone en esa posición doliente y poder generar una mejor forma de reaccionar frente a la agresión.
En la clínica un paciente de once años, inteligente y buen alumno, que ha padecido el flagelo del acoso, comenta que lleva años sufriéndolo, desde los insultos, burlas, robos, acusaciones injustificadas, humillaciones, viviendo en un terror día a día, miedo a estar en los recreos, miedo a hablar, a comentar e involucrarse en las actividades al igual que sus compañeros.
Una angustia intolerable ya que día a día era otra la experiencia negativa, llevada a cabo por este chico, el cual pertenecía a una familia disfuncional y que proyectaba en su víctima toda la agresión contenida en él.
Un día este joven explotó y les dijo a sus padres lo que le pasaba y el motivo de no poder dormir y tener pesadillas.
Los padres honestamente dijeron desconocer la magnitud del sufrimiento de su hijo.
El chico decía que ya se había acostumbrado al maltrato hasta el día en que ya no pudo más y habló con sus padres de lo que le pasaba, en la clínica se notaba la lucha del niño contra sus sentimientos depresivos y la incapacidad por otro lado de relacionarse en otros ambientes por el miedo al acoso.
En algún momento del proceso terapéutico comentó la idea de una conducta suicida que, aunque no planeada había estado presente en momentos de angustia y depresión.
En cuanto al fenómeno del acoso, este es un proceso inconsciente grupal que recae sobre la víctima, desde el lugar del acosador existe la necesidad de ser protagonista del maltrato con actitudes crueles, también él se siente vulnerable de ser él el maltratado por lo que es una solución que el maltratado sea a otro.
El acoso es un síntoma y debe de encontrarse la causa, éste, además como padres, maestros, directores tenemos que estar pendientes cuando se presentan los síntomas y no minimizarlos.
Bibliografía
- Kerzner, S .(2013) The crucial role of the third in bully victim dynamics,Psychoanalytic Inquirí, número 33,p.116-123
- http://acosoescolar.net
- Freud,S, (2008) Obras completas, volumenXVIII,Pulsión y destinos de pulsión. Buenos Aires Amorrortu